sábado, 1 de junio de 2013

GOTA.-






GOTA.-

Hoy fui gota, y al caer
me convertí en mil,
mil formas,
mil colores,
mil vidas…
hoy quise ser rio
para llegar al mar
hoy salté de muchas formas
pero ninguna como la de ayer
o antes de ayer
desde en una corriente natural.
hoy fui nuevamente agua
y nuevamente forma liquida
regando la tierra que me dio vida
regando los árboles que profundizan sus raíces en lo mas profundo de Gaia


Hoy me revelo contra todo lo que me impida avanzar en mi propia corriente
lo que haga que mi fluir se estanque
que falte el oxigeno
que ignore el recorrido vital de mi existencia
hoy bajo desde lo más alto…
desde los hielos eternos de las más altas montañas
hacia los valles más profundo y fértiles
hoy me convierto nuevamente en barro
nuevamente en desierto
nuevamente en piedra
Y nuevamente en nube
para después ser nuevamente agua que fluye

No quiero ir por tuberías que marquen mi recorrido
No quiero salir de un grifo para después ser bebido y meado
No quiero ser escupido
No quiero bajar por aguas fétidas y podridas
No quiero pertenecer al agua diseñada y tratada

Ser gota libre, de mil formas y mil colores
Para crear nuevamente mil vidas… 
Juan Manuel Álvarez Romero©2013-05-31


martes, 21 de mayo de 2013

Solo a veces








http://www.youtube.com/watch?v=_QvUniNN6X8&feature=share



A veces no sé donde quedan los anhelos;
otras no sé donde la libertad... 
a veces la realidad se confunde con los sueños, 
a veces... sólo a veces…
pero es sólo a veces; sólo a veces
y cuando ocurre, a veces, parece que ya no existes
que ya no eres, que ya no respiras...
en esos a veces, te das cuenta que sin el amor nada tiene sentido
y retomas el vuelo, el vuelo que a veces, nos hace libres para siempre
y ya no hay más “a veces” que nos hagan dejar de creer…
desde ese vuelo mágico, nunca dejas de soñar


Juan Manuel Álvarez Romero©2013

sábado, 11 de mayo de 2013

Algún día…



















Algún día…

He caminado por la orilla de un río y, observado las luciérnagas, en la otra orilla, en un bosque tan alto como el cielo… y bajo un cielo que se despedía del día…

… mientras el sol caía, miré como se coordinaban lentamente, las luciérnagas, en un lenguaje que desconocía, y que intuyo ahora, y que a la vez, me sigue fascinando…

Comienzan a emitir su luz, de una en una, de dos en dos, de tres en tres… y así
hasta llegar a emitir una sola luz, en un parpadeo milenario, de miles y miles de ellas… nunca vi tantas… ninguna se perdía o variaba el ritmo de sus luces… me pareció alucinante …

Me senté cerca de un viejo pescador, que también las miraba junto a la orilla… y le pregunté por ellas, y él con mirada confusa, pero a la vez sabia… me contestó, que las observaba desde pequeño, siempre venia a pescar al mismo lugar… y solo, se quedaba observándolas, tarde tras tarde, hasta que el cielo se oscurecía, y el bosque quedaba totalmente alumbrado, en un espectáculo sinfónico maravilloso de luces y de color… incluso imaginaba su música… con un lenguaje particular… místico, incluso quántico …

Me dijo que él le hizo la misma pregunta a su padre, y su padre a su abuelo y, así una generación tras otra de pescadores, en aquél río … y todos decían lo mismo, que su luz, sus luces, eran tan antigua como la tierra… que eran el reflejo del mundo y de la humanidad, aunque siempre, hay algunas que brillen más que otras, aún así, todas emiten su luz, y no dejan de alumbrar …

y cuando esto ocurre, entre los hombres y el mundo , la vida resplandece…

como lo hacen ellas…

Luego me tarareó una letra…

Algún día, la luz se detendrá en forma de luna,
y la luna quedará colgada del cielo, como una lámpara maravillosa...

Y cuando la luna quede colgada, en forma de lámpara maravillosa,
las estrellas y el universo se confabularan para nuestro encuentro...

El mar será de cristal, para que podamos caminar sobre él...
la tierra, será tan fértil, que todo será de un verde eterno...
el cielo será nuestra casa...
las luciérnagas nos alumbrarán los caminos

Y cuando esto ocurra, abriremos nuestras alas, y volaremos;
volaremos sobre las montañas, entre valles, sobre ríos, y ciudades del pasado

Y ya no habrá que volver... a ningún lugar,
porque el lugar, seremos nosotros.
Juan Manuel Álvarez Romero©2013-05-09

jueves, 9 de mayo de 2013

Algún día











 Algún día la luz se detendrá en forma de luna,
y la luna quedará colgada del cielo, como una lámpara maravillosa...
cuando la luna quede colgada en forma de lámpara maravillosa,
las estrellas se confabularan para nuestro encuentro...
el mar será de cristal, para que podamos caminar sobre él...
la tierra será tan fértil, que todo será de un verde eterno...
el cielo será nuestra casa...
las luciérnagas nos alumbrarán los caminos
Y cuando esto ocurra, abriremos nuestras alas y volaremos
sobre las montañas más hermosas, jamás soñadas
Y ya no habrá que volver... a ningún lugar,
porque el lugar, seremos nosotros dos.
Juan Manuel Álvarez Romero©2013-05-09

jueves, 2 de mayo de 2013

Atrapado









Atrapado

Atrapado, persigo bosques milenarios
Atrapado en sueños
Atrapado en la existencia

Atrapado

No consigo olvidar
sin sucumbir en la memoria,
con voz, y sin  silencios

Atrapado

Sin fronteras, sin limites…
Sin muros y,
con la palabra

Atrapado

En abismos sin fondos
En conclusiones efímeras
En días infinitos

Atrapado

Entre laberintos de hormigón
En lo que quedó,
y lo que pudo ser…

Atrapado

En el encuentro
En la pérdida
En el amor

Atrapado

En el querer huir
En el quedarse
En el estar

Atrapado

En el yo
En el nosotros
Y en el vosotros

Atrapado, Atrapado, atrapado
Juan Manuel Álvarez Romero©2013-05-08

lunes, 29 de abril de 2013

La mirada












La mirada, esa mirada que buscamos constantemente en los ojos de los otros, en los ojos de un niño,de un amigo, de una amante... en los ojos de una abuela;  en los delirios ajenos, en las voces que hablan y hablan,  en los silencios nuestros y de los otros.
La mirada que buscamos en las palabras, en el papel en blanco… en el horizonte sin definir, en las montañas por conquistar.
La mirada que deseamos en nuestra almohada, bajo nuestras sabanas, junto a nuestros sueños.
La mirada que desdeñamos un día y que hoy echamos de menos.
La mirada al corazón, y al corazón que amamos y, añoramos para nuestra vida.
La mirada perdida, la ausente, la cómplice.
La mirada de nuestra vida, de nuestro mundo.
La mirada que vemos en el hambre, en la guerra, en el caos que rige  el mundo.
La mirada, esa mirada a un tsunami, a un tornado, a un camino.
La mirada a los bosques milenarios que desaparecen y no por catástrofe natural, al aíre, a la tierra que se nos desmorona entre los dedos como el agua que comienza a desaparecer.
La mirada, esa mira ancestral que ya no recordamos como parte de nuestra alma.
La mirada, esa mirada de niño que perdimos por el camino y que hoy buscamos como parte vital de nuestra existencia humana.
La mirada al infinito por descubrir, conquistar y, en muchos casos, por recuperar//.
La mirada que se cruza en nuestros caminos, y nos avisa de que no hay un mañana, para otra mirada más.

Juan Manuel Álvarez Romero©2013-

domingo, 28 de abril de 2013

Al destino...

 






 ¿Y tú? donde estarás, sé que andabas pintando paisajes en el mundo de los sueños; el mundo que tu y yo imaginamos una vez y que luego hiciste solo tuyo… sé que estas allí, en ese lugar sin nombre, gozándolo tu solo. No le pusimos dirección, ni ciudad, ni país. Pero sabíamos que podría estar en cualquier parte de este mundo o de cualquier otro, en algún lugar del espacio tiempo, indefinido mundo, al que yo no logré alcanzar contigo. Me volví a recoger mis bártulos y cuando regresé ya no estabas… te montantes en el tren sin mi… y el que yo cogí nunca te alcanzó. Malditos bártulos, ¿porqué debemos cargar con ellos? Y tú pensaste que yo no volvería. Te sentirías tan mal como yo al descubrir que no estaba… supongo. Hiciste bien, espero; mi vida ya no fue igual nunca más… y supongo que la tuya tampoco.

Yo sigo en mi mundo, ese mundo que cree para aliviar tu ausencia, esa ausencia que solo lleno imaginándote en nuestro mundo, te imagino en él, sentado ante el mar, el mar que soñamos… y que está ahí, ante mi, pero con tu ausencia. . 

Juan Manuel Álvarez Romero©2013